- Pérdida de confianza
- Contacto físico devaluado
- Perdón vs Olvido
- Desconexión y miedo
- Conclusiones
La infidelidad en el matrimonio es uno de los obstáculos más dañinos y desgarradores que hay que superar para sanar la relación. La infidelidad deja su huella sin importarles a los implicados. Una vez que se ha producido, no hay forma de borrarla
A menudo, la infidelidad es un acto de traición lo bastante grave como para poner fin a una relación, y los que siguen teniendo una aventura tienen problemas para mantener el cariño mutuo en los años siguientes a la aventura. Poco importa si se trata de una aventura emocional o física; el precio de la infidelidad es caro en ambos casos. La vida después de una aventura tarda mucho en volver a la normalidad.
Pérdida de confianza
Tras llevar una doble vida amorosa, el precio más obvio de la infidelidad que se paga es la pérdida de la confianza que la pareja tenía antes en su cónyuge. Por desgracia, más a menudo para aquel a quien el cónyuge fue infiel, la confianza en futuras relaciones y amistades también se ve dañada. La confianza no se recupera fácilmente, si es que alguna vez se recupera. El daño creado por la infidelidad es una herida emocional. Esa herida puede formar una costra, pero incluso el más mínimo movimiento en la dirección equivocada puede desgarrar la herida de nuevo
Una palabra, un pensamiento, una acción: el más mínimo movimiento puede desencadenar la desconfianza de una persona hacia los demás. La pérdida de confianza es doble. Ambas partes sufren la incapacidad de compartir sus vidas con los demás sin miedo a la traición, y así es como y por qué las relaciones acaban mal.
Contacto físico devaluado
¿Por qué es malo el adulterio?
Aunque la infidelidad no impide que los cónyuges se toquen, el valor del contacto físico suele perderse tras un episodio de infidelidad. se pierde el poder que tiene el contacto físico, tanto sexual como no sexual. Disminuye como coste emocional de la infidelidad.
Para los hombres, la visualización de su cónyuge con otro hombre puede ser atormentadora. Para las mujeres, la idea de que su cónyuge muestre afecto hacia otra persona puede impedirles participar plenamente en el ámbito físico del matrimonio.
Junto con la desconfianza, la infidelidad puede impedir que una pareja vuelva a sentir la chispa o el fuego que una vez tuvieron su matrimonio y su cercanía física. Aunque los cónyuges puedan sobrevivir a una infidelidad sin separarse, es probable que la conexión física en la relación nunca vuelva a ser la misma
Perdón vs Olvido
Para que una pareja pueda seguir adelante en el matrimonio, después de un acto de infidelidad, el perdón debe estar presente. El perdón ya es bastante complicado de por sí. Lo es aún más cuando se trata de un compromiso o un contrato roto Pero, ¿es lo mismo perdonar que olvidar? ¿Significa «te perdono» que es como si la acción nunca hubiera tenido lugar?
La respuesta es absolutamente no
Debido a que el olvido probablemente nunca ocurrirá, hace que el perdón de una aventura sea mucho más difícil. Cada día, el cónyuge debe llevar a cabo el acto de perdón, a veces verbalmente y a veces con acciones. A la inversa, es importante que este cónyuge recuerde que el perdón también significa no mantener el hecho sobre la cabeza del otro cónyuge. Justificado o no, este tipo de acción impide la curación y obstaculiza el verdadero perdón
Desconexión y miedo
Por último, pero no por ello menos importante, está el miedo y la ansiedad que existen cuando uno o ambos cónyuges han sido infieles. Los momentos previos a la revelación de la traición y a la recuperación del adulterio no suelen ser tranquilos. Se han pronunciado palabras o se han cometido acciones que llevan a sospechar de la infidelidad del otro. Este tiempo genera descontento y ansiedad en ambos cónyuges, pero especialmente en aquel para el que el matrimonio ha permanecido sagrado.
Unavez descubierta la infidelidad, el miedo y la ansiedad no desaparecen, sino que se intensifican como consecuencias de una infidelidad. Las dificultades añadidas de la desconfianza, la desconexión y, a veces, la resistencia a perdonar hacen que el precio de la infidelidad sea realmente alto. Algunas parejas deciden permanecer juntas por diversas razones (hijos, finanzas, etc.), pero pueden optar por abstenerse de cualquier obligación conyugal típica.
Conclusiones
Esta no es una lista exhaustiva de lo que se pierde en el curso de la infidelidad como efectos de una aventura. Es más bien una visión del riesgo que supone actuar por impulso o deseo. Tu pareja es la que has elegido voluntariamente. Si decide que el matrimonio en el que está inmerso actualmente no es la pareja con la que desea seguir adelante, tome las medidas adecuadas para abandonar su matrimonio antes de causar un dolor evitable y un alto precio por la infidelidad.
Superar la idea de ser víctima de una infidelidad cuando usted se ha implicado al 100% y su pareja no ha hecho lo mismo, probablemente le dejará destrozado y vulnerable a cualquier forma de dolor. Las relaciones ocupan un lugar importante en nuestras vidas y el proceso de curación lleva mucho tiempo
Para hacer frente a la infidelidad, debes tener en cuenta los siguientes puntos:
- Relájate y respira antes de tomar una decisión
- Atiende a tus pensamientos en lugar de ignorarlos o reprimirlos. Es obvio que sentirás el dolor y la herida. Tómate tu tiempo para procesarlos y darles salida.
- Piensa en ti y date tiempo. Mímate y entiende cómo puedes aprovechar tu tiempo en lugar de obsesionarte con la situación
- Aborda el asunto. Decide si tienes que salir de la relación o quedarte y darle otra oportunidad a tu pareja
En el siguiente vídeo, Samuel muestra cómo gestionar el dolor que experimentamos debido a una infidelidad. Échale un vistazo
La infidelidad no sólo te hace daño a ti y a tu pareja, sino también a los que te rodean. ¿Estás dispuesto a pagar el precio de la infidelidad?
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